Lindsay Lohan parece haber sido la víctima de un mal diagnóstico por parte de los médicos que la trataron y ahora la clínica donde permanece desde que salió de la cárcel ha comentado que Lohan está bien.
Los médicos que la tratan confiesan que “No tiene ni problemas psiquiátricos ni presenta dependencia alguna a los fármacos que venía tomando”. Algunos médicos ya piensan que la jueza se extralimitó al dictar una sentencia en la que Lohan debía estar en la UCLA durante 90 días.
Tras la llegada de la actriz al centro médico se le retiraron los medicamentos que decía tomar (Dilaudid, Ambien, Adderall, Zoloft, Trazodone y Nexium) y en ningún momento presentó el síntoma de abstinencia. Lo mismo sucedió con la ingesta de alcohol por lo que los médicos creen que es una persona “totalmente normal”.
El problema psiquiátrico que aparece en la sentencia, transtorno bipolar, tampoco se ha observado por parte de los médicos que la han tratado. Eso sí, advierten un pequeño problema de “desorden de la personalidad” pero que esto es completamente normal en todos los actores y actrices de Hollywood.
Los médicos piensan firmar sus informes y darle el alta a Lindsay en menos de 30 días. Si como ella misma ha comentado esto es el primer paso hacia un futuro mejor nos alegramos de dar esta noticia. A ver si Lohan demuestra, de una vez por todas, que es una buena actriz y que no tiene que depender de los escándalos para nada.
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